Tumor cerebral infantil

El cerebro es el órgano que controla el pensamiento, la memoria, la emoción, el tacto, las habilidades motoras, la visión, la respiración, el hambre y todos los procesos que regulan nuestro cuerpo. Por todo ello, cuando un niño padece un tumor cerebral, los síntomas pueden ser diversos.

Los tumores cerebrales pueden aparecer a cualquier edad, provocando alteraciones cognitivas, de conducta, dificultades motoras y de la sensibilidad.

Una vez que el tumor cerebral infantil es diagnosticado y extraído por medio de una cirugía es importante comenzar una rehabilitación neurológica para ayudar al niño o al adolescente en la recuperación de las funciones que se han visto alteradas y que afectan a su desarrollo o autonomía.

¿Cómo puede ayudar un neuropsicólogo en la recuperación de un niño o adolescente que ha sufrido un tumor cerebral?

Los déficits cognitivos son uno de los síntomas más frecuentes en personas que han pasado o están pasando por un tratamiento con quimioterapia y/o radioterapia. Los problemas de memoria, de atención o de planificación pueden tener consecuencias especialmente importantes en estos niños. Estas dificultades pueden afectar directamente a su rendimiento escolar, dificultando el aprendizaje y poniendo en riesgo su futuro académico.

La rehabilitación neuropsicológica proporciona estrategias que mejoran el rendimiento de la atención y de la memoria, y hacen sentir al paciente más confiado y motivado. Una intervención a tiempo puede ayudar a la vuelta a la normalidad lo más pronto posible.

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